“Este supuesto empresario Chipi es un impresentable, tiene que ir preso”

El jefe de la Policía de Tucumán, Joaquín Girvau, calificó como “impresentables” al exintendente de Alberdi, Luis “Pato” Campos, y al empresario Roque “Chipi” Giménez, luego de que se difundiera un audio en el que Giménez le sugiere a Campos que se adjudique el control de la Policía, la droga y la violencia en el municipio. El hecho provocó una fuerte reacción política y judicial en la provincia, con allanamientos, operativos de seguridad y la intervención del gobierno, durante los últimos días de mayo y comienzos de junio.

En la grabación, cargada de amenazas, groserías y referencias al narcotráfico, Giménez le dice a Campos: “Vos tenés que decir a la policía la manejo yo, a la droga la manejo yo, a la muerte la manejo yo”. Esto llevó a que el gobernador Osvaldo Jaldo ordenara una intervención inmediata en Alberdi, y se designara un nuevo interventor municipal. Además, se realizaron allanamientos en las casas del exintendente y de un empleado municipal, donde se secuestraron teléfonos celulares.

“El audio es indignante. Hablan de droga, de muerte, de gobernar con autoritarismo. Es una vergüenza”, expresó Girvau, quien aseguró que la Policía actuó con rapidez y que ya había iniciado una investigación antes de que los audios se viralizaran. “Cuando tuvimos conocimiento del audio, dimos intervención inmediata a la fiscalía del Centro Judicial Capital. Hay delitos federales y policiales. Vamos a hacer todo lo que haga falta para que este sujeto termine preso”, afirmó sobre Giménez.

El jefe policial también criticó duramente al supuesto empresario: “La Justicia tiene que explicar de dónde sacó el dinero para montar una constructora. No puede ser que se burlen así de la ciudadanía tucumana y de las instituciones”. Aunque ya se pidió la prisión preventiva, la Justicia Federal la rechazó por el momento. No obstante, Girvau sostuvo que si se reúnen las pruebas necesarias, Campos podría ser detenido pronto.

Actualmente, Alberdi se encuentra bajo control policial, con presencia de Gendarmería y autoridades provinciales. “La ciudad está tranquila. Que a nadie se le ocurra venir a hacer problemas, porque la Policía va a actuar con firmeza. No nos va a temblar el pulso”, advirtió Girvau.